Yo no soy Joyce: Suicidio de Édouard Levé

lunes, 13 de diciembre de 2010

Suicidio de Édouard Levé



Sucidio
Édouard Levé

Bajo amenazas y coacción me fue "recomendado" este libro. Gracias a dios no tuve que hacer mucho caso del puño y me dejé guiar, simplemente, por los consejos de esa persona, que siempre ha sabido recomendarme lecturas. Gracias Jorge: Otro acierto y otra lectura que he disfrutado enormemente.

Interesante el título, ¿verdad? Es un título que no deja de sorprenderte por la simpleza y la contundencia que emana. La primera página hace honor a tal título y tras acabarla no podemos más que seguir leyendo pues ya nos ha atrapado. A través de lo que parece un amigo muy cercano al difunto se cuenta el suicidio y la vida del suicida. Cómo se siente, cómo piensa, por qué actúa de una u otra forma, habla de sus recuerdos, de sus viajes, de su mujer. Narra absolutamente todo lo relacionado con la persona que fue pero nada explica de las razones que pudieron llevar a un joven de 25 años a encañonarse con una escopeta, esas hay que descubrirlas con el pasar de las páginas.

Nacer me sucede 
Vivir me ocupa 
Morir me acaba 

Este terceto, uno de tantos al final del libro, es para mí el que mejor representa lo que pudo llevar a ese joven a tal decisión: el morir como finalizador de la existencia, lo que define a la persona, lo que remata una obra y la da por terminada. Durante toda la lectura no puedo dejar de pensar que estoy siendo un espectador de esa vida al igual que lo fue el que la vivió. Una persona que lo hace todo y parece ser que bastante bien pero que aun así no se siente partícipe de nada (el narrador nos cuenta que muchas veces ni se reconoce a sí mismo en el espejo), parece que actúa por el hecho de hacerlo, de saber que puede hacerlo y una vez hecho para él pierde todo interés, y para el que esperar a que pasen más cosas que si pueda disfrutar le aburre demasiado.

Muchas veces pensamos en el suicidio como una huida, una puerta de salvación para personas desesperadas. En este caso no es así, parece que es la acción de una persona que considera que ha hecho todo lo que podía interesarle  y para la que la muerte es algo más que quiere hacer por decisión propia.

No es raro que a lo largo de la lectura uno se sienta identificado con el personaje ya que algunas vez hemos actuado de una forma descrita en el texto, pero no uno no juzga, simplemente es una comparación entre iguales y eso le da un carácter muy íntimo y personal a la lectura. Y con una escritura en segunda persona a veces se siente que el narrador está realmente hablando con nosotros.

Un dato que le da un valor extra y un sabor completamente diferente al libro es que Levé se suicidó tres días después de entregar el manuscrito. No es lo macabro lo que lo hace especial, sino el hecho de pensar que pudo escribir sobre su vida y su decisión.

1 comentario:

  1. de 451 vdd??? suena muy bien, espero poder conseguirlo, que los libros de 451 es dificil pillarlos por aca

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