El Caso Pasolini. Crónica de un asesinato de Gianluca Maconi

El pasado 28 se dio a conocer la nueva editorial Gallo Nero. Esta vez escribo sobre uno de sus primeros títulos El caso Pasolini cabeza de lista de una de sus tres colecciones, Gallographics.


Lo primero a destacar es que, como bien se declara la editorial, parece ser que nos encontramos ante una digna heredera de Adelphi y de las letras italianas. Que su primera novela gráfica trate sobre uno de los grandes artistas allí nacidos y sobre lo que a él le sucedió es un claro ejemplo.

La MORTE non é nel non poter comunicare, ma nel non poter piú essere compresi.

Por otro lado se puede empezar a observar las características gráficas e ideas estéticas que caracterizarán a Gallo Nero que, desde mi punto de vista, están a la altura de grandes casas editoriales además de que perfeccionan las tendencias actuales pero con ciertos toques que mejoran profundamente el estilo y le dan una imagen diferente.

Algo que necesito decir es que se nota el mimo y el cuidado con el que se ha trabajado en este libro, un gusto por la sencillez, dejando que sea el dibujo y el guión los que hablen en nombre de la casa, siendo esta elegante expositora de este gran trabajo. Asombra que una casa nueva sea capaz de un trabajo tan minucioso y tan perfilado, solo espero que no haya sido por que es de los primeros y que sigan así con todos sus títulos por salir.

La obra se centra en el asesinato de Pier Paolo Passolini en la madrugada del 2 de noviembre del año 1975. Un asesinato resuelto nada más comenzar la investigación que parece no estar tan cerrado ya pasados 35 años del suceso. El autor, en una gran destreza literaria y de lápiz plasma la oscuridad que envolvió a Italia en esos años y que ahora parece que vuelve pero esta vez a escala mundial. Con una intensidad de guión y de filosofía y erudición que oso comparar con el gran From Hell de Alan Moore se nos presentan las últimas horas de vida del artista y como parecía conocer su destino afrontándolo con resignación.

Una pregunta que me hago es, si en la editorial tienen novela y novela gráfica, ¿no morirá una esfixiada por la otra? Pocos ejemplos veo de este tipo de editoriales. Sólo les digo que, mientras sigan haciendo este trabajo, tendrán un fiel lector.